Se sabía que esto no era contenido para niños y aún así los disfraces fueron todo un éxito el Halloween pasado
Skibidi Toilet, la caricatura que el año pasado hizo que cientos de niños salieran a las calles en Halloween utilizando disfraces de cámaras y televisiones empezó mal el 2024, pues todo apunta a que la serie está siendo investigada por el país de Rusia.
Así que si tu hijo, hermano menor o un conocido se disfrazó de tele, esta información te interesa, pues de acuerdo con el sitio Dexterto, la policía rusa estaría investigando a la serie por causar un daño a los niños que la ven.
Y es que después de que la serie animada se convirtiera en una tendencia a nivel mundial, acumulando entre 30 y 60 millones de reproducciones en sus capítulos, un ciudadano de Moscú denunció uno de sus videos.
La razón que motivo al hombre a hacer sería su preocupación por el tipo de contenido que está al alcance de los niños, pues según lo que él creyó, la serie podría ser perjudicial para los menores.
La denuncia habría alertado a las autoridades rusas, motivo por el que la policía decidió realizar una exhaustiva revisión de los episodios, según reportaron varios medios locales.
reportaron varios medios locales.
No solo la serie es investigada, sino también su creador, Alexey Gerasimov, debido a que las autoridades consideran que la caricatura puede volverse adictiva, generar dependencia hacia el consumo de Internet y fomentar la violencia en los pequeños.
¿Qué es Skibidi Toilet, la caricatura que enloqueció al Internet?
Skibidi Toilet es una serie animada creada por el animador Alexey Gerasimov y difundida a través de videos en el canal de YouTube Dafuq!Boom!, el cual actualmente cuenta con más de 33 millones de suscriptores.
La caricatura cuenta la historia de una guerra entre los Skibidi Toilet, unos tétricos personajes con cuerpo de retrete y cabeza humana; y los Cameramen, unos hombres con cámaras como cabeza.
Sin embargo, conforme los episodios van avanzando, la trama se va volviendo cada vez más oscura, compleja y bizarra.
